Hiyane, Roger
La palabra quechua ‘haywa’ significa ofrenda y cuando asume el flujo verbal de ‘haywarikuy’ podría ser traducido como “invitar para alcanzar algo, compartir para lograr”. El Haywarikuy andino es un festín amoroso, de sabores, colores, olores, sensaciones, texturas y símbolos propiciatorios que abre, mantiene y cierra un espacio sagrado de conexión con las fuerzas supremas e invisibles de la naturaleza.
‘Pacha’ es una concepción andina que significa ‘espacio-tiempo’, porque en el Ande nunca se dividió la realidad en compartimentos estancos, sino como interfases en continua interacción. Cada conciencia o alma humana puede ser una Pacha (una totalidad interactiva), que en el transcurso de las vidas se complementa, dialoga, fructifica y abre canales con otras Pachas, cada vez más amplias, sabias, amorosas y perfectas. Es un proceso ilimitado e inagotable que va de célula a galaxia.
Queriendo hacernos sentir esas ‘Pachas’, este libro reivindica lo interactivo en un Haywarikuy: la rauda danza de reciprocidades ópticas, el movimiento súbito ocular y rico en sensaciones y sentidos en una ofrenda andina. Y la fiesta: el ‘pujllay’ andino, el carnaval gozoso que trae un propósito mayor: el Florecimiento.
Haywarikuy nos ofrece regalos en papel como capullos, frutos y ruecas sagradas. Y nos ofrenda diseños ancestrales, cómo era antes: el arte como una estrategia de magia para llamar a la fecundidad del cuerpo, la mente y el universo. Se trata de arte-ofrenda y del artista como un oferente: igual a todos y, a la vez, tan diferente.