LLORENTE, MARTA
El jardín es un lugar híbrido desde sus orígenes, nace del anhelo humano por domesticar la naturaleza y de nuestra eterna búsqueda de la belleza, y representa, por todo ello, el espacio de mayor tensión entre lo natural y lo artificial. Como representación del paraíso perdido es asimismo universal, de ahí que a lo largo de la historia se hayan creado infinidad de idílicos vergeles que responden a la imaginación, las aspiraciones y las necesidades de sociedades concretas. En estas extraordinarias páginas Marta Llorente nos invita a aproximarnos de forma sutil a la realidad del jardín desde múltiples perspectivas: el itinerario por edenes pasados y presentes, reales y ficticios, nos ayudará a comprender su función en el tejido urbano, las manifestaciones que ha tenido en la literatura y el arte, y su futuro como espacio natural en un contexto de emergencia climática.
El jardín es un lugar híbrido desde sus orígenes, nace del anhelo humano por domesticar la naturaleza y de nuestra eterna búsqueda de la belleza, y representa, por todo ello, el espacio de mayor tensión entre lo natural y lo artificial. Como representación del paraíso perdido es asimismo universal, de ahí que a lo largo de la historia se hayan creado infinidad de idílicos vergeles que responden a la imaginación, las aspiraciones y las necesidades de sociedades concretas. En estas extraordinarias páginas Marta Llorente nos invita a aproximarnos de forma sutil a la realidad del jardín desde múltiples perspectivas: el itinerario por edenes pasados y presentes, reales y ficticios, nos ayudará a comprender su función en el tejido urbano, las manifestaciones que ha tenido en la literatura y el arte, y su futuro como espacio natural en un contexto de emergencia climática.