DELGADO ORUSCO, EDUARDO
En un período particularmente oscuro de nuestra historia reciente, donde la cultura estaba en gran medida controlada y sometida a la censura, los afanes de modernidad de la generación de arquitectos titulada tras la guerra civil, y de la sociedad en general, encontró su mejor cauce de expresión a través de una de las instituciones fuera de toda sospecha: la Iglesia. Esta circunstancia propició propuestas que circulaban entre la experimentación y la utopía configurando una verdadera vanguardia de avance cultural. Los proyectos y las obras de los Fisac, Fernández del Amo, Sota, Cabrero, Aburto, Laorga, Sáenz de Oíza, Corrales, Vázquez Molezún, Carvajal, García de Paredes y otros muchos cuyo recuento haría la lista interminable, constituyen un cuerpo digno de atención y estudio, también porque son la explicación y el cimiento de la arquitectura española contemporánea.